TEBEOSFERA \ TEBEOTECA \ DOCUMENTOS  \  ENTREVISTA

De Senda a Playboy. Entrevista a Juan Álvarez y Jorge G. [parte segunda]

Entrevista celebrada en la localidad malagueña de Vélez-Málaga el día 17 de octubre de 2002, durante la celebración de las Segundas Jornadas de Cómic en Vélez-Málaga.

 

Página de Los Mendrugos,

[ Imagen: página de "Los Mendrugos". Haga clic para ampliar la imagen © 2003 Juan Álvarez y Jorge G. ]


[ viene de la anterior página ]

T: Bueno, Juan, pero tú seguiste con la animación, y también estabas haciendo tiras para prensa, de donde surgieron Los Mendrugos ¿no es cierto?

JA: Cuando Jorge se presenta a los bomberos a mí me llaman de Madrid para hacer storyboards de la serie de dibujos animados La Corona Mágica. Yo me voy a Madrid y estoy allí unos meses, hago el story por el que percibo 125000 pesetas del año 1988. O sea, ese dinero por story, que correspondía a un episodio de dibujos animados, y yo me hacía dos al mes, dos capítulos al mes, 250 papeles, que bien estaban en el año 1988. Tenía poco tiempo para la historieta, sí, pero había comenzado en 1985 a hacer una tira mensual para la revista de la Universidad de Murcia, Campus. Pese a todo, seguí haciéndola hasta 1990, no dejé la tira nunca, ni para hacer animación. Hacía el personaje “MM, el loco del claustro”, un estudiante que se convertiría en el MM de Los Mendrugos.El Loco del Claustro. Clic para ampliar. En 1990 comencé a trabajar en una empresa de publicidad en Murcia, la que comentaba Jorge, Contraplano, y como en el último año que estaba haciendo la tira la pude hacer en color, le apliqué acuarelas. Dada esa circunstancia, a principios de 1990 se me ocurrió enviar tres tiras a El Jueves, y a los dos días me llamó Gin.

JG: Yo no participaba en esa tira, yo estaba entonces de “bomberismo” total, con la academia, etc., etc.

JA: Gin me dice que le gusta mucho: «Oye, nen, ¿tú de dónde sales?» Muy gracioso él.

JG: Y fue la primera vez que Juan decidió que aquello tenía calidad y podía ofrecerlo a El Jueves. Por entonces publicaban en El Jueves Tha y otros, veíamos que ya no era la revista que todos conocíamos, de humor político y eso, habían ampliado páginas, publicaban cosas en color, estaba M. Prado, Alfonso López, Maikel, Tharrats... [hacemos un paréntesis en la entrevista para comentar las cualidades injustamente poco valoradas de la labor de Tha] O sea, en El Jueves ya había historietas con color, y había cantidad de autores que eran historietistas que estaban enviando cosas.

T: Bueno, historietistas también lo fueron J.L. Martín, Ventura y Nieto, Kim...

JG: Sí, pero era otra cosa, eran los que siempre habían estado. En El Jueves se hacía más humor por lo general, con la excepción de gente como Ventura y Nito, o Kim, que eran autores más comiqueros, que hacían más historieta. Pero al incluir a Alfonso López, a Tha, a Miguelanxo Prado, estaba claro que la revista estaba apostando por aglutinar a la gente del cómic, para que acudiera ese público como cliente habitual de El Jueves. En nuestro caso se aprovechó la coyuntura.

JA: Es lo que hablábamos antes, que era un poco para ver cómo iban los tiros para algunas cosas. Saber adaptarte. Y yo, como hacía la historieta esta de estudiantes, “MM”, pensé que podrían ser interesantes, unos estudiantes en El Jueves.

T: ¿Solamente les propusisteis esa idea?

JA: Les mandé las tres tiras de este personaje, MM, y Gin me llamó y me dijo si podía hacer media página semanal. Dije que sí, claro; comencé con media página semanal y sobre un solo personaje, MM, un estudiante, un personaje que faltaba en la revista, a mi parecer, donde había representación de diferentes estratos sociales. Era en color, pero no lo daba Jorge todavía.. Le daba el color yo mismo. Eso ocurría en la primavera de 1990; entonces, en mayo, Jorge y yo nos vamos al Salón del Cómic de Barcelona y nos llevamos una historieta que habíamos hecho juntos de unos indios, ese chaval del metro que luego aparecían unos indios por ahí...

T: La que apareció luego en Pireo, de La Factoría

JA: Antes se publicó en El Tío Saín Página para Tío Saín, de 1997en blanco y negro, y también hicimos una portada, la del número 1 de El Tío Saín, alusiva. Esa portada se expuso en el stand de Murcia, en Barcelona, y la historieta a color, que era inédita entonces, la llevamos allí y la expusimos con la obra de otra mucha gente que había llevado lo que habían hecho para el concurso de Murcia Joven. Nosotros no íbamos por el concurso, íbamos como profesionales, pero allí fuimos a reforzar un poco la imagen del Murcia Joven. Entonces, como yo estaba ya en El Jueves, visité a la gente de la revista para conocerlos y tal, porque no nos conocíamos aún personalmente. La Mayte [Quílez] me llevó allí, me presentó a Kim, a Ventura, y me metió en el stand: yo acojonado. En un momento dado, cojo a Gin y me lo llevo al stand de Murcia Joven y le enseño la historieta de los indios, y le digo: «Esto lo hago con Jorge». Se queda mirando, se baja las gafas, y dice:  «Oye, ¿me podríais hacer dos páginas semanales de este estilo y con este color?». Yo dije inmediatamente que sí, claro; se lo dije a Jorge y se me ocurrió lo de juntar a MM con el resto de colegas y llamar a la página “Los Mendrugos”. Cuando yo le comento a Jorge esto y veo la realidad, le digo a Gin que no podemos hacer dos páginas semanales, porque tardamos un mes en hacer UNA página [risas]. Jorge se tiraba un mes para pintar una página al óleo.

JG: Era un formato bastante amplio, y el óleo tarda mucho en secar.

JA: Esporádicamente, sólo esporádicamente, hicimos dos páginas de Los Mendrugos, alguna de ellas magistralmente guionizada por Víctor Eme, hasta que a finales de diciembre de 1990 Gin nos dice: «Oye, que los personajes gustaron montón ¿No podríais hacer una página semanal, tíos?»

JG: Adelantamos trabajos y lo que yo hice fue utilizar secativo de cobalto para que no tardaran tanto en secarse las páginas. Quien vea las páginas de Los Mendrugos al óleo se dará cuenta de que son muy acrílicas, no parecen óleo, no están muy empastadas. El proceso era así más rápido y el formato pasó también a ser más pequeño. Por eso pudimos seguir publicando de forma más continua una página semanal en color.

T: Tú no acusaste problemas para entregar, imagino, ¿eh, Juan?

JA: Ese mismo año yo estaba en la agencia de publicidad (un poco cansado) y haciendo el layout para la serie de dibujos animados de Babar para Canadá. Poco después me encargaron de Madrid el storyboard para otra serie alemana, que era de un elefante también: Benjamin Blünchen. Ahí estaba yo con mucho trabajo, pero no hubo problemas para sacarlo adelante. La verdad es que nunca he padecido la crisis de la página en blanco.

JG: Es tan disciplinado y le tiene tanto miedo al hecho de que no tenga nada que hacer que funciona con un sistema de trabajo increíble, que no todo el mundo podría soportar.

T: Tú también pintabas cuadros... ¿Conseguías hacer algo al estar tan ocupado?

JG: Aparte de mi trabajo como bombero... no, no me quedaba tiempo. Me ha gustado siempre seguir pintando, pero desde que publicamos de forma regular en El Jueves pues casi que no; y si te quedaba tiempo lo que hacíamos era acumular más páginas para tener un remanente y hacer más cosas fuera de lo que era El Jueves. Aparte, ten en cuenta que en el mismo El Jueves hemos hechos también páginas de secciones de actualidad, algunas con guiones de Javim, algunos pósters centrales; portadillas (portadas no hemos hecho ninguna). Luego, eso sí, apareció la revista Puta Mili que dirigía Maikel, junto con Ivá, y nos propusieron crear un personaje, y creamos a la Capitana Diana.

JA: Pensamos que una oficial como Dios manda podía dar mucho juego, por eso hicimos a Diana, un personaje que no existía en Puta Mili. Nosotros no estuvimos desde el número 1 de esa revista [de 1992], la observamos, vimos que había personajes de todo tipo salvo éste, y propusimos hacer una “maciza”.

T: Ya, pero, ¿ahora, en ese momento, ya podíais con dos páginas semanales en color?

JG: En ese momento sí, eran a formato más pequeño, teníamos más mano también porque ya llevábamos la frecuencia semanal, y con la experiencia cumples en el plazo.

JA: En Puta Mili, además, hacemos portadas, pósters centrales, encargos de cositas para el interior aparte de la historieta de “Capitana Diana”. E incluso, en cierto momento, yo en solitario comienzo a hacer una tira diaria para el Diario 16 de Murcia, de actualidad y sin personaje fijo.

T: La primera mitad de los noventa demostráis una actividad incesante, porque es ahora cuando destináis también dibujos e historietas para los productos editados por la AATRM: El Tío Saín, El Saco del Tío Saín, Monográficos El Tío Saín...

JA: Sí, los montamos entre varios, Manolo Martínez, Javim, Víctor Eme, Sebastián Fernández de Cartagena, Paco Alemán, Salva Espinosa, eh... Pedro Vera... Nosotros, por haber estado en el ámbito de la profesionalidad, captamos individuos que parecían interesantes: Puebla, que trabajó luego en Diario 16, por ejemplo. Toda esa peña coincidimos en el espacio y en el tiempo.

JG: Y siempre con el Murcia Joven de fondo, era como el fermento de nuevos talentos, y con el impulso de personas concretas, Javim, Vicente Tiburcio, José Manuel Campillo, que trabajaba en la Concejalía de Juventud y le gustaban mucho los tebeos. Está claro que siempre que se hace algo con respaldo oficial, dentro de la institución siempre, siempre, hay alguien a quien le gustan los tebeos, eso es de lógica. Aquí, en Vélez-Málaga están Paco [Francisco García Bravo de Mansilla], Ramón [Pérez Rodríguez], Juan [J. Ignacio Rando], una serie de señores que están en un puesto que les permite contactar con responsables públicos. En nuestro caso era Campillo.El Tío Saín, en 1999

T: El Tío Saín fue una publicación que pese a estar confeccionada por amateurs (salvo vuestro caso) presentaba una calidad fuera de lo común: era un tebeo a ojos vista. ¿Quién estaba detrás de esa apariencia profesional?

JA: Gente con ilusión y con una calidad artística extraordinarias. Se presentó el proyecto y el primer número y también el segundo, y la Red Municipal de Bibliotecas de Murcia, que depende de la Concejalía de Educación del Ayuntamiento decidieron darnos un dinero porque al fin y al cabo esos ejemplares servirían para la red de bibliotecas, que el Ayuntamiento tiene un montón. Creen que el tebeo es interesante, dan un dinero y se crea esto, y luego nosotros tenemos fondos para las bibliotecas, de autores murcianos me refiero. O sea, se proyectan a los autores murcianos y la red de bibliotecas se surte de tebeos. La idea primera fue de Pedro Antonio, quien hoy sigue llevando la Red Municipal de Bibliotecas de Murcia. A mí, el hecho de llevar tanto tiempo currando ya me permitía tener contactos con la Concejalía, había dado algunos cursos de cómic en varios centros jóvenes que dependían del Ayuntamiento... y eso me permite estar en contacto con técnicos y trabajadores de la Concejalía, que te abren el camino para sacar adelante el proyecto.

T: Aparte de en lo local, ¿qué repercusión tuvieron las publicaciones de la AATRM en el ámbito editorial del cómic español?

JA: Bien, lo mandamos a El Jueves, a El Víbora, lo reseñaron siempre que se lo hemos mandado, y todo son parabienes, todo muy bien, nos felicitaban: «Una buena iniciativa». Pero, poco más. Nunca hubo un circuito sólido. Tampoco para la publicación paralela de información sobre tebeos, El Saco del Tío Saín, que la sacamos

Porque tenían algunos colaboradores muchas ganas de escribir crítica y comentarios. Luego la gente se fue desencantando, fue escribiendo menos (también cambiamos el formato para hacerlo más barato y se publicaban menos páginas), y pasó lo que le pasó a otros productos. La gente se hace mayor, hacen su oposición, trabajan, se echan novia, el proceso vital.

T: Visto desde hoy, ¿sirvió El Tío Saín para descubrir nuevos talentos murcianos realmente?

JG: De hecho no solamente era la publicación de estos tebeos, era un todo: El Tío Saín, Murcia Joven, El Saco... Llegaban al concurso, exponían su obra, y luego estaba el reclamo de El Tío Saín para poder publicar. Campillo, además, tuvo la feliz idea de llevar almendras, mojama y otras delicias de la tierra a Barcelona, y con la excusa esa se convenía a editores y autores para que acudieran al stand de Murcia y vieran la obra de los chavales allí expuesta. Había que vender el producto. Por ejemplo, José Luis Munuera fue uno de esos ganadores allí expuestos; Acuña, que ha publicado en El Víbora y que ahora va a publicar en L’Echo des Savannes... Efectivamente, sirvió de mucho.Tramas, de 1996. Clic para ampliar.

T: Tramas apareció en 1996, fue el primer álbum de historietas firmado por Juan Álvarez.

JA: No, ya se había publicado 2 álbumes de Los Mendrugos (1993, 1995) y otro de La Capitana Diana (1995). Tramas pertenecía a la colección de Monográficos de El Tío Saín, donde también salieron monográficos de Pedro Vera, de Javim o Juan Navarro, que fue muy transgresor y creo que le iban a denunciar por una exposición muy graciosa de él en Beniajám. Porque también desde la AATRM se hicieron actividades paralelas. Hicimos también la exposición "La capitana Diana" en 1994, "100 años de cine y cómic" en 1995, "Historietistas murcianos contra la intolerancia" y "El humor gráfico en la prensa" en 1996, y otra exposición monográfica de Ángel y Guillermo... Fue todo un movimiento efervescente el de la segunda mitad de los noventa. Nosotros luego pusimos el sello de AATRM de cosas que se hacían, pero no estábamos ya tan en contacto con Manuel Martínez, que fue quien llevó el peso de todo en los últimos años. Nosotros patrocinamos un poco, echamos una mano. Creo que en el 2000 fueron los últimos estertores de toda la movida; de El Tío Saín salieron 13 números, y más o menos se consigue que fueran 2 números anuales. Luego ya no podemos mantener el ritmo...

T: A finales de los noventa haces una tira humorística para un diario deportivo, Juan ¿eras hincha tú?

JA: Pues otro trabajo más, de finales de 1997 y 1998. Yo quería hacer algo en prensa pero no era practicante ni aficionado al fútbol, me planteé ir cerrando círculos y me quedaron los diarios nacionales deportivos As y Marca. Me caía mejor As y decidí enviarles a ellos un proyecto. El director me llamó, me dijo que le gustó mucho el trabajo y comencé a publicar todos los días salvo el lunes. El personaje se llamaba Pepenalti, era en blanco y negro, Jorge no participaba. Era mucho trabajo, pero ya estaba acostumbrado a llevar esa dinámica, es lo que te da el oficio. Y mantuve la tira hasta el año 2000. Se han publicado dos libros recopilatorios editados por La Factoría de Ideas.

JG: Yo quiero incidir en una cosa en la que la mayoría de la gente no ha reparado. A partir de que Juan publicara esa tira en As, probablemente sea casualidad, pero Marca responde publicando viñetas de Ángel y Guillermo, también ligados a Murcia. Ellos se dieron a conocer en La Opinión de Murcia, y por estas fechas ya estaban publicando en la revista Hablan y su tira en El Mundo. No dejaba de ser curioso que Marca publicase a dos humoristas también de Murcia, aunque Guillermo es sevillano pero ha pasado en Murcia mucho tiempo. Juan estuvo en As tres años, llegaron los de Recursos Humanos y dijeron que iban a cambiar de imagen, que no es que no les gustara la tira pero que ya no tenía cabida en el periódico.

T: Luego está vuestro trabajo en revistas, Primera Línea y Playboy. En este último caso os venís a sumar al grupo de historietistas españoles que triunfan con obra publicada en el extranjero.

JA: Ese mismo año, en junio de 2000, y poco antes de que me llamaran del diario As, ya habíamos enviado a Playboy de EE UU una historieta de tres páginas, a un concurso que se convocó en la primavera del 2000. Entran en contacto con nosotros los de Playboy y nos comentan que les gustaba mucho, que qué buenos éramos y tal, pero no nos dijeron si nos iban a contratar o no, y nos entró la desazón. Página para Playboy. Clic para ampliar.Sobre todo en el otoño de 2000, cuando yo estaba haciendo tiras para el As en color, para una serie de entregas que iban sobre la conquista del Everest. Pero ya no iban saliendo bien, se iba produciendo desbarajuste, malas reproducciones del color, cambiaban la tira de sitio en la página... algo ya nos iba diciendo que aquello era mala señal. Vimos el verano mal, teníamos seguro solamente lo de El Jueves, lo del diario As nos dejó un poco cojos y estábamos a la expectativa de lo del Playboy. En junio me dicen, «Nene, te vas del As», Playboy nos dijeron que ganamos el concurso y que nos publicarían la página en su página web, peor no nos contratan.

JG: Nos pidieron obra nueva, páginas inéditas, querían ver lo que podíamos hacer. La cartoon editor Michelle Urry nos dice que le había encantado, que, y cito textualmente: «en los 20 años que llevo trabajando en la revista Playboy es la primera veo que veía algo parecido», que “very good” y que estaba entusiasmada con el trabajo. Pero ellos no nos dicen nada más, sólo que quieren ver trabajos, otro tipo de cosas, también de corte erótico, pero sin decirnos que parámetros seguir. De hecho no nos dan pautas, no nos plantean límites. Juan, cuando sale de As cogió un disgusto bastante gordo; yo le animo bastante y, bueno, mandamos las dos historietas de una página a Playboy, pensando que podría ser algo eventual, y hasta octubre no nos contestaron.

JA: Entonces, pensamos en ponernos las pilas, nos dijimos que si nuestro trabajo había gustado a otros editores de fuera de España y a otras publicaciones que no eran de cómic o de humor, lógicamente nuestro trabajo interesa, vamos a abrir posibilidades, hacemos una selección de lo que más nos gusta y comenzamos a mandar a revistas: a Interviú, Primera Línea... Yo envié un personaje de humor también a una revista económica, Dinero, y de allí me llamaron para hacer una tira, a finales de 2000. Y luego es cuando nos llaman de la revista Primera Línea, que también contrató a Sandra Uve y a otros dibujantes. En octubre también nos dicen de Estados Unidos que compran las dos páginas y nos dan la enhorabuena por pertenecer ya a la revista Playboy.

T: Y Playboy, desde el primer momento que os encarga trabajos, ¿os indica qué debe y qué no debe aparecer dibujado?

JA: No, pero no hace falta que ellos te lo digan, porque tú sabes cómo va la revista, que es erótica pero no porno, y no se pueden ver penes; nosotros trabajamos por intuición y no nos interesa transgredir normas. Tiene que salir el pene, ¿por qué? A la misma historieta premiada, cuando iba a salir en internet, le quitaron un pedazo de miembro masculino, y un plano del femenino, porque entendieron que esas escenas no contribuían a la historia y no les beneficiaba a ellos ponerlas. Eso sí, son siempre muy respetuosos. Y muy puntuales, la verdad es que da gusto trabajar con ellos.

T: ¿Y se puede hablar de cifras?Página para Playboy. Clic para ampliar.[1]

JA: Mejor no. Pero pagan mejor que cualquier editor en España. Y, además, tienen unos detalles estupendos. Hace poco, cuando acababa de ocurrir lo del 11 de septiembre, llevaron un original nuestro, que precisamente era una historieta de un bombero, a una de las estaciones más importantes de Nueva York para exponerlo allí. Fíjate el trato y la consideración de la obra: nos dijeron que no enviásemos el original hasta que no hallasen una estación de bomberos con el espacio adecuado y a la altura de la calidad de nuestra obra.

T: ¿Hicisteis esa historieta en honor de los héroes del 11-S?

JG: No, no, ellos piden trabajo con seis meses de antelación. Tratan estupendamente nuestra obra y a nosotros, con decirte que cuando al edición de Playboy es traducida en España, nos permiten a nosotros hacer la traducción de nuestra propia página para el Playboy español... al cual, por el buen trato que tenemos con el editor, enviamos el original físico para que ellos lo manipulen allí. En algunos casos, yo creo que está mejor reproducida nuestra historieta en el Playboy español que en el americano.

JA: En EE UU ha habido historietas que nos han rechazado. Directamente. Ellos tienen derecho a rechazar la obra que no les gusta, sin que ello tenga que ser censura. El editor tiene reservado el derecho de admisión. La última palabra la tiene Hugh Hefner, todo pasa por sus manos, todo, incluso nuestra historieta. Nos han devuelto páginas que vienen firmadas por Hefner, con el «OK» [risas], cuando tengamos que hacer una exposición se verán. Algunas veces nos han dicho que cambiemos una viñeta porque les resultaba confusa, o bien nos han rechazado una página completa, de forma muy respetuosa.

T: Y ahora acabáis de publicar un nuevo libro de Los Mendrugos

JG: Sí, seguimos haciendo historietas, para Primera Línea, para El Jueves, y también tenemos una sección en la página web de la revista, www.eljueves.es, “El rincón del estudiante”. Pero eso no quiere decir que trabajemos con ordenador, seguimos dibujando a mano y sobre papel. Ha sido solamente hace poco que el hermano de Juan compró un escáner bastante bueno y con él ya podemos enviar la página de Los Mendrugos por internet, lo cual resulta más cómodo. Página para Primera Línea. Clic para ampliar.Esto puede ser un problema a la hora de reproducir el color, porque nuestro color tiene una gama de tonalidades que, si se escanea mal, no sale. Y fíjate que sigue habiendo gente que no quieren que les enviemos la obra ni por internet, ni grabada en CD-ROM ni nada por el estilo, quieren el original, como Playboy. El ordenador te da una calidad impecable pero hay profesionales que siguen demandando los originales.


[1] [Altuna ha declarado que cobraba de Playboy hasta 5000 dólares por página de historieta. Véase entrevista de J.C. Hidalgo]

[ Con fecha 04-II-2003, Manuel Martínez precisa que el cuidado en la diagramación y otros aspectos técnicos y logísticos de todas las publicaciones editadas por la AATRM correspondieron eminentemente a él, ayudándose de tan sólo 125.000 pts. que cedía la administración pública y usando hardware de su propiedad ]


[ © 2003 Manuel Barrero, para Tebeosfera 030131; enmendado por los autores en 030207  ]