Información de la editorial:
Cala (Calamidad) y María Guerra (Artillera), actores profesionales a caballo entre los siglos XIX y XX, se encuentran viajando en un tren de vapor cuando, sin saber cómo, aparecen en una estancia que está siendo reformada. De su vida “real” sólo quedan unos dibujos grabados con punzón en la pared, todo lo demás es una sucesión de sorpresas con un único nexo: un amplio patio en el que, a modo de estación, para una y otra vez su tren.