LA SENCILLEZ DE HIERONYMUS B. 1997-2007
JOSÉ A. GUTIÉRREZ

Title:
The simplicity of Hieronymus B. 1997-2007
Resumen / Abstract:
Reseña de Hieronymus B. 1997-2007 (Dibbuks, 2007), de Ulf K. / Review of Ulf K.'s Hieronymus B. 1997-2007 (Dibbuks, 2007)
Palabras clave / Keywords:
Ulf K., Cómic poético/ Ulf K., Comics Poetry
  • Hyeronimus en el archivo.
  • Hyeronimus frente a una chimenea.
  • Hyeronimus y el libro alado.
  • Hyeronimus y la estrella.
  • Página completa de paisaje industrial.

LA SENCILLEZ DE HIERONYMUS B. 1997-2007

 

Ulf K. es un dibujante alemán, nacido en 1969, que recibió el Premio Max und Moritz al mejor dibujante del Salón del cómic de Erlangen en 2004. También recibió en 2009 el Premio al Mejor Libro Infantil de Renania del Norte-Westfalia, lo que muestra cuáles son las inquietudes de este autor. En diversas entrevistas, Ulf K. ha referido que tiene múltiples influencias en su obra, pero que destaca las que le proporcionó el cómic franco-belga. Con estas referencias el lector puede aproximarse a Hieronymus B., título centrado en el protagonista de estas historias desarrolladas entre 1997 y 2007 y cuyo nombre es un indisimulado homenaje a El Bosco, de quien Ulf K. se confiesa devoto. 

Las viñetas mudas de esta historieta se construyen con sutileza, línea clara, mínimos elementos y sencillez; los elementos justos para que sea solo la narrativa visual la que construya las historias; para que el lector no requiera de palabras para entender los códigos de esta historia y para que llegue a emocionarse con nubes juguetonas, libros alados, peces voladores que advierten de peligros o una estrella de Navidad perdida como si se tratara de una niña pequeña. Lectura, pues, recomendable para el amante de lo bello, de los cómics que emocionan y de la poesía.

Una reseña sobre esta obra del autor alemán Ulf K. conduce a cuestionar y a meditar sobre ciertos conceptos que parecen inmutables y que, a mi entender, no lo son. Transmito con este artículo al lector de la reseña mis muchas dudas y una sola certeza, que lo que le cuento es una visión personal, pero no ligera y, espero, tampoco atolondrada.

Sumergirse en las páginas mágicas y oníricas de Hieronymus B. nos traslada a otro mundo, el reducido mundo de un funcionario que escapa de su pequeña cárcel a través de ensoñaciones y limitadas fugas a su universo interior. Nótese que se ha empleado la forma “sumergirse en la historieta” en vez de “leer la historieta” y esta licencia se debe a una de las dudas. ¿Puede hablarse en sentido estricto de leer un cómic cuando se leen las historias sin palabras de Hieronymus B.?, ¿acaso no es más conveniente hablar de mirar o contemplar este cómic al igual que se miran o se contemplan un cuadro o una ilustración? Mi respuesta es que, a pesar de la ausencia de texto, se realiza un ejercicio de lectura y no de visualización, porque las acciones que realiza el receptor de esta obra consisten en entender y descifrar estas viñetas de una forma muy similar a la lectura de palabras. Existe una interacción entre el lector y la obra que no es simple y que consiste, de manera básica, en buscar la sencillez y disfrutarla.

Otra de las mayores cuestiones que se plantea al leer esta obra nace de algo que se siente pero que, en muchas ocasiones, cuesta definir. Es decir, sabemos que hay poesía en este cómic, pero, ¿por qué lo sabemos?, ¿dónde nace esta semilla poética?, ¿dónde la esconden estas viñetas?. La respuesta no es única, pues habrá quien en esta obra solo entienda cierta ingenuidad y mucha sencillez, pero para quien reconozca en las viñetas elementos surreales, oníricos, ilógicos, hay una explicación fácil, el germen de la poesía nace en los sueños, tal y como sostenían los poetas surrealistas. Y sobre esos componentes se construye esta obra que es, a la vez, sencilla, ingenua, onírica y poética.   

El autor de este artículo tiene una absurda y personal teoría; la hipótesis de partida es que de cada lenguaje podemos conocer sus elementos nucleares cuando al prescindir de todos los demás elementos, el que nos queda nos hace reconocer qué lenguaje usamos. De alguna forma podemos quitar al cine, sonido o color, y reconoceremos en una película muda y en blanco y negro que es cine; de alguna manera podemos hacer lo mismo con el lenguaje pictórico y en obras simples, abstractas, sin marco, podremos reconocer un cuadro. Hieronymus B. es historieta, como Lirios Rotos es cine o los dibujos de Altamira son pintura. Y como todas estas obras, contiene los elementos básicos del cómic: dibujos, viñetas, bocadillos, eso sí, sin palabras. La tesis de esta teoría que se expone es que, cuando las obras hechas en cada lenguaje se sustentan tan solo en lo básico y buscan la belleza, están cerca de ser, o son, poesía. Hieronymus B.es, por tanto, poética.

El lector reconocerá en Hieronymus B. rasgos de Bartleby, el escribiente, del funcionario Akaki Akákievich Bashmachkin, del registrador don José, y del entrañable Sr. Hulot; todos estos personajes transmiten la misma ternura que Hieronymus, mas es notable una diferencia entre ellos y el protagonista de esta historieta: Hieronymus no nos genera lástima, tiene algo simpático y optimista que deja un buen sabor de boca. Muestras de esta forma de evitar el dramatismo son las historias en las que Hieronymus cambia de lectura y cambia su visión del mundo, metáfora aplicable a esta obra en un ejercicio metalingüístico, y la historia en la que encuentra una estrella perdida en la calle. Ejemplos de cómo la poesía no solo se construye sobre el drama.

 

El sueño va sobre el tiempo
flotando como un velero.
Nadie puede abrir semillas
en el corazón del sueño.
 
Federico García Lorca, Así que pasen cinco años (1931)

Creación de la ficha (2019): Félix López
CITA DE ESTE DOCUMENTO / CITATION:
José A. Gutiérrez (2019): "La sencillez de Hieronymus B. 1997-2007", en Tebeosfera, tercera época, 12 (30-XI-2019). Asociación Cultural Tebeosfera, Sevilla. Disponible en línea el 26/IV/2024 en: https://www.tebeosfera.com/documentos/la_sencillez_de_hieronymus_b._1997-2007.html