Álbumes en rústica que traducían la serie homónima de Milton Caniff y que constituyeron el primer lanzamiento, y el más longevo, de ese sello editor dentro de una línea de publicaciones dedicadas a rescatar clásicos de la historieta de la prensa americana.
Reproduce las tiras diarias y planchas dominicales del 13/1/1947 al 14/8/1955 en 29 números
Libros de 64 páginas en formato apaisado y en blanco y negro (tiras diarias) y color (planchas dominicales) con cubiertas en color. Las páginas están pegadas directamente a las cubiertas.
Estos tebeos publicaron tanto las tiras diarias como las páginas dominicales, dado que continuaban las líneas argumentales de la serie diaria. Cada ejemplar publicó las tiras distribuidas en tres por página y las páginas dominicales ocupaban dos páginas, repartiendo sus cuatro tiras en dos por página. La colección respetó en todo momento el orden cronológico original desde el inicio de la serie y se trata de una de las pocas recopilaciones de Steve Canyon en la que se trató de ser fiel a la publicación original en la prensa manteniendo el color de las páginas de los domingos. El precio de cada ejemplar comenzó siendo 1.000 pta, llegando a alcanzar las 1.400 pta al final de la colección. El mismo no figura en ninguno de los ejemplares. Los primeros ejemplares (más de la mitad) llevaron el mismo depósito legal para luego llevar DL diferente en cada número. Sólo los últimos cuatro números llevaron ISBN.
La calidad de la reproducción y traducción es suficientemente buena. El material procedía de Italia por lo que la traducción posiblemente partiera del italiano en lugar del inglés original. Se respeta el montaje original de viñetas como en las otras colecciones de la línea Art Comics.
La serie Steve Canyon supuso el inicio de la línea ART COMICS de Eseuve, dedicada a la publicación de los clásicos americanos que se irían añadiendo en los años siguientes. La colección se inició en el año 1988 y se canceló en 1992, el mismo año que la mayor parte de las otras series, con el número 29.
La serie:
Cuando Milton Caniff comenzó esta serie ya era un autor consagrado por la realización de su otra serie Terry y los piratas, por lo que Steve Canyon fue un éxito desde antes incluso de estrenarse en 168 periódicos a la vez. Caniff deseaba comenzar una nueva serie en la que los derechos del personaje le correspondieran por completo y no tuviera que plegarse a las políticas de los "syndicates", como así ocurría con Terry y los piratas, propiedad del Chicago Tribune Syndicate. Así, el 13 de Enero de 1947, poco después de abandonar Terry en manos de George Wunder, comienza la publicación de Steve Canyon después de una intensa campaña publicitaria, y permanecería puntualmente a su cita diaria en la prensa durante 41 años, hasta el 4 de Junio de 1988, tras la muerte de su autor.
Canyon, al principio, es un piloto propietario de una empresa de transporte aéreo, siempre al borde de la quiebra, especializada en misiones peligrosas. Esto proporciona a la serie un gran escenario donde desarrollar las aventuras del personaje. Sin embargo, a partir de la guerra de Corea, el protagonista vuelve a ingresar en la Air Force, donde militó durante la II Guerra Mundial, y allí permanecerá hasta el fin de la serie, involucrado en todos los conflictos bélicos consecuentes a la Guerra Fría. Steve Canyon es, pues, una serie de aventuras en un entorno bélico con muchos componentes dramáticos y románticos.
El esquema inicial es parecido al de otras series de aventuras, como la misma Terry y los piratas con la cuál podemos establecer un parangón entre personajes: Steve Canyon/Pat Ryan, el aventurero adulto dotado de un corazón generoso; Reed Kimberly/Terry Lee, su protegido adolescente, y Happy Easter/Connie, el contrapunto humorístico a ambos personajes. Sin olvidar el componente amoroso protagonizado por Summer Olsen y Normandie Drake en sus respectivas series.
Esta creación, de gran aceptación durante casi toda su existencia y cargada de ciertas polémicas dada la evolución ideológica y política de su autor, disfrutó también de versiones radiofónicas, televisivas e incluso fue transladada a la literatura en una pequeña serie de novelas, todo ello en los años 50, el periodo más álgido de su popularidad.
La edición de Eseuve, pese a ser la más completa que se ha hecho en España hasta la fecha, sólo llegó a recopilar los primeros ocho años y medio de su existencia, permaneciendo el resto, en su mayor parte, inédito en nuestro país. En este periodo la realización gráfica de Milton Caniff, con ayuda de su asistente Dick Rockwell, fue muy elaborada, tornándose el dibujo más descuidado a medida que pasaban los años.