Historieta de 19 páginas con la continuación de las aventuras del luchador interplanetario Killraven. Sobre un argumento ideado por Roy Thomas y Neal Adams, Gerry Conway desarrolla un guión que ilustraró Howard Chaykin, con entintado de Frank McLaughlin y colores, en origen, de Petra Goldberg que en esta edición española no fueron utilizados (tampoco en posteriores versiones españolas de esta historieta, también editadas en blanco y negro).