Descripción de la Editorial:
El Capitán Frío y los demás enemigos habituales de Flash han cometido muchos errores en su vida, pero ninguno comparable al asesinato de Bart Allen, el cuarto Velocista Escarlata. Aunque ya se hayan arrepentido, han tenido que pasar varios meses en un planeta prisión y ahora, ya de vuelta, han recibido la oferta de Libra de unirse a su Sociedad Secreta de Supervillanos. Por su parte, a Inercia, al que instigó la muerte de Bart, Wally West lo congeló en el Museo de Flash, donde aguarda una oportunidad.