ordinario

El periodo que va del año 1980 a 1983 es fascinante dentro de la historia de la publicación de los cómics Marvel en España.
Vértice, la editorial que los había introducido en el país y que llevaba publicándolos desde 1969, atraviesa una crisis que le lleva a cancelar todas sus colecciones, sólo para volver a intentar remontar el vuelo en un par de ocasiones, incluido un cambio de nombre a Ediciones Surco, antes de echar el cierre definitivo. En directa competencia con Vértice/Surco aparecen otras editoriales dispuestas a tomar el relevo: Bruguera, Montena, Distrinovel y, en el horizonte, Forum, que sería la que finalmente se llevó el gato al agua.

Durante un tiempo todas estas editoriales estuvieron publicando material de Marvel de forma simultánea. Un personaje podía aparecer indistintamente en una u otra editorial, convirtiendo la vida del aficionado en un verdadero infierno. Pero por otro lado se publicaron historias de lo más interesantes: el destino de Fénix en la Patrulla-X, el nº 200 de Los Vengadores o las primeras entregas de Daredevil (entonces todavía Dan Defensor) dibujadas por Frank Miller, por no hablar de nuevas colecciones como Caballero Luna, Rom o los Micronautas y la presentación de personajes como She-Hulk, en lo que se puede considerar un auténtico canto del cisne por parte de Vértice.

Pero no sólo de aquella editorial trata este libro. Tenemos también sendos episodios dedicados a la breve y caótica andadura de Bruguera en el mundo de los superhéroes, las raras ediciones de Montena y Distrinovel y, cómo no, los primeros pasos de Forum.
Salvador Molina nos guía en este viaje al pasado en una narración bien documentada, como es habitual en él, pero, sobre todo, muy amena.