Editorial ;
Queridos lectores: espero que ustedes estén tan contentos como yo de que se haya podido completar finalmente el tomo 3. El 2020 se hizo elástico para la revista, y a la vez, me queda un poco la sensación de que se nos escapó de las manos sin darnos cuenta. Pero para esas cosas confusas está el olvido. Y para las cosas concretas está la memoria: podemos mirar atrás y ver 12 revistas que conforman una historia. Una pequeña parte de la historia de este género en el país: la historieta argentina. Una pequeña historia guardada en tres cajitas, para nosotros, un valioso tesoro.
En estas palabras notarán un tono de despedida. Es un poco así y un poco no. En realidad, esta especie de diario de editora, simplemente sigue el mismo tono de los números anteriores: contarles un poco cómo es la ardua tarea de editar una revista en Argentina. Y en el contexto actual, la historia de la revista podría terminar en este número. Es una posibilidad, queridos lectores. Pero todavía no lo sé. Hasta hace pocos meses les diría que sí, que esta es la despedida. Pero las crisis traen movimientos. Las faltas buscan completarse. A mediados del 2020 perdimos a la mayoría de nuestros distribuidores y los kioscos de diarios (nuestro verdadero lugar) profundizaron su crisis. Pero nosotros insistimos. Ahora la revista sale por kioscos de capital y Gran Buenos Aires, cuando se levanta, se va a un nuevo distribuidor en el interior, en paralelo llega a comiquerías de todo el país y por nuestra parte la vendemos a través de la página web. Todo ese sistema está mejor hoy, pero con los lentos tiempos de pagos, todavía no estoy segura si la revista vuelve a sustentarse a sí misma (con el único ingreso de la venta, no tenemos publicidad ni apoyos estatales) como para que podamos seguir adelante. Sustentarse significa que se autofinancien los gastos de papel e impresión, el trabajo de edición es gentileza de la editorial.
Así que no sé qué va a pasar, lo veremos en los próximos meses. Pero sobre todo, lo que he aprendido este año que pasó, es que la única oportunidad es la resistencia. La meta de resistir nos mantuvo a flote en los peores meses. Y resistir implica que salga un tomo 4. No se los prometo, pero sin dudas está en el camino de la resistencia. Y ya tenemos tanto material valioso para poner ahí que sería una pena que no suceda. Y para terminar, voy a traer un pedacito de aquel primer editorial colmado de entusiasmo, para que nos contagie un poco:
“Así que esta es una buena oportunidad para que todos pongamos algo de nuestra parte: los artistas crean, los editores editan y los lectores compran y leen”.
Ya sé que los autores siguen creando, nosotros seguiremos editando (tenemos varios proyectos de libros también), necesitamos que ustedes sigan comprando y leyendo.
Eternas gracias a los lectores fieles, a los ocasionales, a los críticos que nos aportan ideas, a los que nos agradecen, a los que nos acompañan… Gracias porque todo ese cariño nos ayuda a sostener esta preciada resistencia.
Paula Varela
editora